Este post tiene una introducción que encontrarás aquí, si aún no la leíste, te sugiero que comiences por ahí.

Mira…

Observa atentamente…

¡Cuánta claridad!

¿Qué ves?

¿Cómo aprende una persona que se expresa de esta manera?

El sistema de representación que usan estas personas es el visual,  se caracteriza por pensar en imágenes y  relacionarlas con conceptos. Por ejemplo, le hablas de un pago e imaginan un billete o una moneda en su mente.

Cuando encuentras personas que tienen el hábito de utilizar mapas conceptuales, esquemas, marcas, colores, gráficos o subrayados para recordar ideas y aprender, es un claro ejemplo de predominancia del sistema de representación visual.

Cuando hablan tienden a mantener su cuerpo más bien quieto y erguido y con la cabeza hacia adelante, mueven mucho las manos, las utilizan para explicar, para completar el sentido de lo que dice.

¿Ya vas ubicando personas con este medio de representación?

Prefieren leer a escuchar. Disfrutan, comprenden, aprenden y recuerdan mirando. 

Son capaces de percibir y recordar detalles de situaciones, de presentaciones audiovisuales, de imágenes, de escritos o de cualquier tipo de contenido, siempre que sea visual. 

Mientras se comunican, mueven los ojos hacia arriba y parpadean con mayor frecuencia que las personas con otro sistema de predominancia. 

Mientras hablan, suelen tocarse los ojos o las sienes y permanecer con la barbilla levantada. 

Su respiración es alta, rápida y superficial. 

Cuando se expresa en forma verbal, generalmente, utiliza un tono alto y un ritmo bastante rápido. 

Al momento de comunicarse busca los ojos de su interlocutor y espera que éste también haga lo mismo.

¿Te ha pasado que una persona se incomode si no lo miras mientras hablas? Incluso ¿que deje de hablar contigo hasta que retomas el contacto visual?

 ¿Reconoces estas características en ti o identificas a alguien de su equipo?

Esta señal es infalible: al hablar, utiliza frecuentemente predicados o expresiones VISUALES, como por ejemplo “¿viste?”, “Mira!!”, “es transparente”, “me queda claro”, “eres brillante!!”, “dale una mirada”, “se me nubló la vista”, “se me encendió la lamparita”, “nos vemos…”

Ahora que ya puedes identificar este sistema y reconocerlo en las personas de tu entorno:

¿Cómo puedes colaborar con el aprendizaje de alguien con predominancia visual?

Al momento de comunicarte:

  • Proporciónale la información de manera escrita, cuidando de incorporar subrayados, negritas, colores y gráficos, de modo de jerarquizar la información más importante que desees que incorpore.
  • Utiliza frases que conecten con su neurobiología y la predispongan a colaborar contigo en el proceso de comunicación como: ¿fui claro?, tengo una imagen de lo que me pides, ¿cómo lo ves?, ¿te lo puedes imaginar?, muéstrame x favor…
  • Otra forma de captar su atención y favorecer su aprendizaje es hablarle a su ritmo y en su tono de voz, algo más alto y rápido de lo que, tal vez, lo harías si no eres visual.
  • Finalmente, es muy importante mirarle a los ojos cuando se le hablas, evitando ser invasivo, pero manteniendo siempre el contacto visual, porque para una persona con características visuales, eso significa que la estás escuchando y lo que más valoramos los seres humanos es ser escuchados y en tu rol de líder, esto hará una GRAN DIFERENCIA!!!

Hoy te he compartido una herramienta muy poderosa para comenzar a comprender y acompañará al menos a los colaboradores que tengan este medio de representación como predominante.

¿Te parece útil, aplicable? ¿Tienes dudas? Deja un comentario así podemos charlar.

¿Estás list@ para ser un líder inspirador?

Este entrenamiento es para tí